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Pablo Ruiz se convirtió en la figura de la Selección gracias a sus dos goles contra Bolivia y un despliegue por toda la cancha. El Nº 19 agarró la redonda y nos contó su historia. Ah, y también cómo fue su primera conquista. Una joya....
"Hola, soy Quique Ruiz y te voy a mostrar mi primer gol contra Bolivia". Sin decenas de cámaras esperándolo. Sin pedidos por doquier de la prensa después de su gran partido, este joven se puso frente a la cámara del sitio oficial de la AFA para hablar de su tarde/noche soñada. Porque en el estadio de Sportivo Luqueño, Pablo la dejó así de chiquitita en el partido contra el seleccionado boliviano. Y no sólo por sus goles, sino porque las corrió todas y se entregó por la camiseta y sus compañeros.
"Estoy muy contento por mi actuación pero mucho más feliz por la actuación del grupo. Veniamos de dos derrotas feas y teníamos que sacar la situación adelante. Contra Bolivia era el día, ganar o ganar como nos decíamos entre nosotros", analiza Ruiz, nacido en comodoro Rivadavia.
Ya es de noche en Luque. Pasaron los dos goles y el primer triunfo de la Selección en el Sudamericano de Paraguay. Y después de pasar por la entrevista de la transmisión oficial, llegó el momento de abrir la puerta del vestuario Nº3 y explotar de alegría. "Los chicos me felicitaron y también hubo cargadas, me decían el nuevo goleador jeje". Fueron las bromas de un grupo que necesitaba ganar y relajarse después de un inicio difícil.
Quique, una de las incorporaciones a este plantel formado por Miguel Lemme hace un par de años, se siente muy cómodo con el resto de los Juveniles. "Me siento muy acompañado por todos, además me dan mucha confianza y eso da gusto. Ser parte de un grupo cómo este nos va permitir pelear hasta el final del torneo", cuenta.
No se le va la sonrisa de la cara. Innumerables notificaciones en las redes sociales, mensajes, llamados, de todo recibió Pablo en las horas posteriores a su noche soñada. El primero de sus dos tantos recorrió los canales de deportes y el público no para de alagar ese zurdazo que besó la red. Pero él no se olvida de donde empezó todo: "Arranque a los 4 años a jugar, en un equipo de Futsal llamado la Super Económica y cómo arquero. Un par de años después mi papá me preguntó si me animaba a ser jugador de campo y le dije que si". ¡Menos mal que cambió a tiempo!
Creció y la Comisión de Actividades Infantiles lo convocó para que juegue entre sus filas. En 2012 viajó a Buenos Aires para jugar unos amistosos con la C.A.I y San Lorenzo puso los ojos en este zurdo que la mueve que da placer verlo. Pero fue recién el año pasado que Quique se mudó a la gran ciudad: "Ellos (San Lorenzo) querían que viajará en 2013, pero mi club prefirió que termine los estudios. Así fue que en 2014 empecé en El ciclón". ¿Y cómo llegaste a ser convocado para la Selección, Pablo? "Me vino a ver Esteban Pogany a Comodoro en un torneo Sub 15 que ganamos con la C.A.I. Después de eso llegó la citación y por suerte estoy acá en el Sudamericano".
Emocionado y contento. Y con la pelota en su poder. Así pasó Pablo Ruiz las últimas horas. En tiempos donde el sistema parece comerse al deporte, historias como esta nos hacen seguir creyendo en lo nuestro. ¿Qué es lo nuestro? Estos chicos que, de cualquier parte del país, se calzan la camiseta argentina y emocionan a los que les gusta el fútbol. Y con Quique y su zurda mágica tienen a un gran representante.
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