“No me van a doblegar, estoy muy fuerte, estoy pensando en que los jugadores me necesitan. Por eso estamos en permanente comunicación telefónica con todos. Tenemos fuerza, pero no es fácil", acotó.
El actual entrenador del equipo nacional aseguró que tras la mini crisis que se desató en la AFA el traspié frente a Chile por las eliminatorias que derivó en la renuncia de Alfio Basile "algo había cambiado".