ENTREVISTA | Fabricio Coloccini
"No me veo como el Cid, todos tiramos del carro"
Lotina hacía un símil tras el partido contra el Zaragoza y definía a Coloccini como el Cid Campeador del Deportivo, pero el argentino no quiere acaparar protagonismo y espera que la fuerza del grupo saque al equipo de la crisis.
Usted es uno de los jugadores que terminó el partido tocado. ¿Cómo está?
Tengo una sobrecarga en la zona del glúteo, pero no es nada importante. Estoy bien.
Hacía tiempo que no marcaba un gol.
Hacía mucho tiempo. Con la situación que se presentó contra el Zaragoza y con todo lo que representaba para la afición no perder, descargué muchas cosas con ese gol.
¿Estaba tan enrabietado como parecía desde fuera?
Enrabietado, no. Lo que pasa es que todos vemos que se están haciendo bien las cosas y no salen. A uno le da bronca eso. Y encima ves que la gente te apoya todo el partido. Cuando estaba en el campo, yo oía un cántico en el que nos decían que siempre nos iban a ayudar. Nosotros necesitamos eso y le quería hacer saber a la gente que para nosotros es muy importante su apoyo.
La gente coincide en que usted está empezando a coger los galones de este equipo.
No sé. Uno aporta y trata de buscar lo que es beneficioso para el equipo. Luego los capitanes y los veteranos son los que tienen que llevar el grupo. Yo no me considera un veterano, pero sí que hace años que estoy en el Deportivo y eso te ayuda un poco a tener más poder de decisión.
Lotina ya le compara con el Cid. ¿Asume ese reto?
No escuché a Lotina, sólo sé lo que me han dicho, pero no me siento como el Cid. Aquí todos tenemos que tirar del carro. Si no lo hacemos, se va a hacer complicado. A veces las cosas salen bien, a veces mal, pero la intención y la actitud siempre van a estar ahí. Eso no va a cambiar nunca.
¿Cómo se puede explicar lo que está pasando en Riazor?
Eso es lo que nos preguntamos. No hay explicación. La gente lo ve. Ve que el equipo tiene lucha, actitud y ansia de ganar, pero el fútbol es así. A veces, como ante el Zaragoza, hay un rebote, le queda a uno servida y adiós, ya estás 0-1.
¿Cree que la afición entiende que es mala suerte?
Sí. La gente lo entiende, más que nada porque se terminó el partido con un empate que no nos beneficia y la afición reconoció el esfuerzo. La gran mayoría del estadio salió aplaudiendo. Por eso me molesta no dar lo que la gente espera. Si la afición no fuese consciente de nuestro esfuerzo, no nos habría despedido con ese aplauso, que para mí es sorprendente, porque sé que la posición no es la adecuada.
Donde hay unanimidad es en las críticas al arbitraje.
Es que nos cuesta llegar, hacer el gol y que luego que te lo anulen o no te cobren un penalti, te perjudica muchísimo, y más en la situación en la que estamos. Eso duele mucho, pero sabemos que son seres humanos y se pueden equivocar. Hay que tomarlo así, porque no hay mala intención.
¿Cómo está el vestuario?
Bien. Es normal que pasen cosas, porque la situación es difícil, pero estamos fuertes.
¿Le molesta que ya se empiece a hablar de un posible cambio de técnico?
Eso son cosas que pasan. Acá el que tiene que respaldar al entrenador es el presidente y darle la tranquilidad para que pueda trabajar tranquilo.
¿Y la plantilla?
Hay las molestias normales de quien no juega, eso siempre va a existir, pero aquí todos confiamos tanto en la plantilla como en el cuerpo técnico y vamos a seguir luchando. En cuando cambiemos esa pizca de suerte que no tenemos, sabemos que van a llegar los resultados, pero estamos ansiosos porque lleguen ya.