貌似伯纳诺特专访 http://www.ole.clarin.com/notas/2008/01/06/01579071.html 00:00 | RIVER: DIEGO BUONANOTTE "Hay que jugar bien y con el cuchillo entre los dientes"
El Enano apuesta por lograr continuidad con Simeone "en el puesto que sea" y banca la fórmula del nuevo técnico: "No sirve jugar lindo si te comés cuatro...".
FEDERICO ROZENBAUM frozenbaum@ole.com.ar
Cuatro desodorantes, pilas para que el MP3 no lo deje sin música y una buena cantidad de ropa interior. Con las compras ya hechas, el Enano Buonanotte deja de ser la aparición más ruidosa de River en el último tiempo para convertirse en Dieguito, el mimado de papá y mamá, quienes aprovechan las últimas horas para consentirlo antes de que se vaya a Mar del Plata. Ausente de las dos últimas pretemporadas de Primera, el zurdo de 19 años se muestra ansioso. "No veo la hora de estar arriba del micro", revela.
—¿Qué estuviste pensando en Teodelina durante estas semanas?
—Pensé en volver de estas vacaciones con expectativas muy grandes para este año. Quiero jugar y que se haga un buen campeonato. La idea es lograr que un gran técnico como el Cholo me tenga en cuenta.
—Un fin de año distinto...
—Seguro. Pude jugar en Primera... Digamos que volví a debutar, porque en el 2006 sólo había tenido unos minutos. El final del año fue positivo en mi carrera, más allá de que en los últimos partidos las cosas no me salieron bien, al punto que ahora ni se dudó sobre si debía viajar a la pretemporada, algo que sí pasó en otras ocasiones.
—¿Eso significa que ya estás afianzado?
—No, significa que mis objetivos deben ser otros. El año pasado soñaba con jugar un tiempito para demostrar lo que puedo dar. Hoy quiero pensar en algo más. Siempre quiero más.
—¿Cómo definirías ese plus que buscás?
—Mi meta es ser protagonista. Sé que va a ser difícil por la cantidad de jugadores, pero me voy a romper el alma para consolidarme y aportarle cosas al equipo.
—¿Sentís presión por lo que se espera de vos?
—Estoy tranquilo. Dentro de todo lo malo, tuve la suerte de mostrar algo de mi fútbol. Siempre digo que antes de ser conocido por los diarios o las publicidades, yo quería ser conocido en la cancha. Ahí es donde me quiero destacar.
—¿Aún sos una promesa?
—No sé. Yo sólo trato de jugar al fútbol, de divertirme, de ser buen compañero y de tener coraje para afrontar lo que venga.
—¿Sabés que en las tarjetas de fin de año de River se mencionaba el día del caño como el hecho del 2007?
—A lo mejor dentro de todo lo malo que nos pasó, pudimos vivir esa tarde hermosa. Para mí fue especial por tratarse de mi primer superclásico y de mi primer partido como titular.
—¿Ya está en tu almanaque el súper del verano?
—Sí, obviamente, me encantaría jugar pronto frente a Boca, como a todos. Pero ahora la meta es hacer una buena pretemporada para no dar ventajas físicas.
—¿Tuviste alguna rutina especial en el receso?
—Hice lo que decía la planilla que me dieron en River.
—¿En lo físico tenés que dar algún salto más?
—Por la genética de mi familia no creo que pueda crecer mucho más. La clave es seguir con mucho gimnasio y entrenamiento para mantenerme en forma. Yo me siento cómodo para jugar al fútbol, me siento bien, fuerte. Sí sé que tengo que adaptarme para evitar el roce. Y eso sólo se consigue con la experiencia, jugando.
—¿Qué impresión te dejó el Cholo?
—Muy buena. Nos transmitió tranquilidad y un mensaje claro: sacrificio y buen fútbol. Y si un equipo es solidario, es ordenado tácticamente y tiene principalmente buenos jugadores, es inevitable que las cosas salgan solas.
—¿Te entusiasma más lo del buen fútbol o lo del sacrificio?
—Las dos cosas. No se trata de jugar lindo si después te comés cuatro goles. Hay que jugar bien. Porque si jugás bien a la larga vas a perder poco. Pero como dice el Cholo, hay que jugar bien y con el cuchillo entre los dientes, je...
—¿Creés que se perdió el estilo de River?
—No, aunque tal vez en el último año ese estilo se vio de a ratos. Hay que darle continuidad.
—¿odés adaptarte a jugar en un 4-2-3-1, con tres enganches?
—A mí me motiva jugar siempre. Voy a estar predispuesto para estar donde el técnico me necesite. En mi poca experiencia en Primera, jugué como doble enganche con Ortega. Y si bien toda mi vida había jugado como único enganche, no tuve problema.
—¿Qué recuerdo tenés del Cholo como jugador?
—Me acuerdo de sus últimos años, sobre todo de su personalidad gigante. Y como técnico, le gusta armar equipos protagonistas. Lo digo por lo que se vio en Estudiantes. Me acuerdo de que en la cancha de River metió tres delanteros...
—¿Te dice algo la Copa Libertadores?
—Para mí todo es nuevo. La Copa es el torneo en el que todo jugador de River quiere estar.
—¿Qué imagen te llevaste de Passarella?
—Estuve en la Reserva en casi todo el proceso de Daniel, incluso pensaba que no me quería. Pero al final me dejó la enseñanza de que no debo bajar los brazos. Lo seguí intentando y en los últimos meses me gané su confianza.
—Lo que pasó en los últimos partidos fue una sombra...
—Pasaron muchas cosas. Creo que en esos partidos faltaron muchos jugadores que absorbían la presión. Yo venía sintiéndome cómodo al lado de Ariel, y tal vez era como un referente a la hora de buscar a alguien para pasarle la pelota, porque para mí es placentero jugar a su lado, saber que te la devuelve mejor de lo que se la das. Lo mismo nos pasó por la ausencia de Belluschi. Por suerte ahora empezamos una nueva etapa, y al grupo se lo ve muy entusiasmado por la llegada de Simeone.
—Hablando del grupo, ¿cómo quedaron las cosas tras los cortocirtuitos del año pasado?
—Se habló mucho más de lo que pasó. Creo que se exageraron algunas cosas. En lo personal me siento cómodo en este grupo.
—¿Intuís que se viene algo bueno?
—Seguro. No vamos a empezar a hablar de títulos, pero si empezamos de cero con tanto compromiso, creo que pronto se empezarán a dar los resultados.
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